Pregunta:
¿Puedo cambiar un horno que utilicé una sola vez para cocinar carne a un horno de leche?
Un utensilio al que hace falta hacerle libún: Un utensilio que absorbió a través del fuego sin un líquido de por medio, por ejemplo: un molde para hornear o un espetón, precisan del proceso de libún. Este proceso consta en colocar los utensilios sobre el fuego hasta que lleguen a la temperatura en la que desprendan chispas. Calentarlo más de lo que normalmente se calienta no funciona para hacerlo kasher para Pesaj (ya que el proceso de libún no es tan sólo por la regla de “de la misma manera en la que es absorbido es expelido”, sino que también hay que quemar el jametz que tiene impregnado; véase en el Torat Habait 2:4 y 300:4 y en el Bedek Habait ibíd.). Por lo tanto no se puede hacer kasher un molde de esmalte o de hierro esmaltado.
Libún kal (sencillo): A todo utensilio que le funciona el proceso de hagalá para hacerlo kasher, se le puede hacer un libún kal (sencillo) en lugar de hacerle hagalá, es decir, se debe calentar el utensilio por todos lados hasta que llegue a una temperatura tan caliente que si se le colocara una paja del otro lado se quemaría (Ramá, ibíd.). Se puede hacer el proceso de libún por partes, es decir, pasar por el fuego una parte del utensilio y luego otra parte, teniendo cuidado de que no vaya a quedar nada de él sin pasar por el fuego.
Hornos de piedra: A los hornos y las estufas construidos con piedras y ladrillos, se les puede hacer libún y kasherizar. Es preferible consultar a una autoridad rabínica antes de hacerlo (Shulján Aruj 451:8).
Horno de repostería: No se debe hacer kasher estos hornos más que en casos de fuerza mayor, ya que dentro de las paredes y en la puerta se acumulan residuos de alimentos notorios. También el horno mismo precisa libún hasta que desprenda chispas, y en los hornos de hoy en día no se puede hacer esto. También hay que tomar en cuenta la kasherización del vidrio de la puerta del horno, y por lo tanto, no se deben kasherizar todos los tipos de hornos a menos que sea un caso de fuerza mayor y sólo después de aconsejarse con una autoridad rabínica. Todo lo dicho aplica también con respecto a los hornos que tienen la opción de lavado automático por medio de una gran temperatura.
Bandejas para hornear: Si son hechas de metal y son utilizadas sin agua, es necesario hacerles libún. Para que el libún funcione, hace falta hacerlo fuertemente hasta que las bandejas desprendan chispas. Las bandejas que están recubiertas con esmalte, no pueden ser kasherizadas (Shulján Aruj 451:1).
En conclusión: Un horno normalmente se utiliza para cocinar sin líquidos lo cual provoca que precise de libun para hacerlo kasher. No obstante, ya que no se cocina directamente en el horno, sino que se cocina en recipientes dentro del horno, el problema son los vapores que expiden los alimentos y para eso es suficiente con limpiar muy bien el horno con detergentes fuertes y luego encender el hormo a la temperatura máxima para que expida todo lo que absorbió. No obstante, por cuanto que el horno tiene gomas y puede haber grasa impregnada allí y la puerta del horno es de vidrio, el cual no se puede hacerle libun, por tanto no se permite hacer libun en los hornos de esta manera mas que en casos de grandes pérdidas o situaciones similares, pero lejatejila no se debe estar cambiando un horno de carne a leche y viceversa por los motivos mencionados. Además, las bandejas si fueron utilizadas directamente con los alimentos no tiene forma de hacérselas kasher. |