Pregunta:
¿Si alguien come comida no kasher, debe bendecir? ¿Y si bendice por error cuando tiene prohibido comer, debe probar el alimento?
RespuestaNo se recita bendición anterior ni posterior por un alimento que está prohibido ingerir, pues ¿cómo sería posible agradecerle a Hashem por un placer recibido de manera ilícita? En caso de que se haya bendecido, la bendición no resulta una alabanza a Hashem sino un daño y una ofensa al Honor Celestial. No existe diferencia entre alimentos prohibidos por la Torá, como en el caso de carne que no fue matada mediante la shejitá, o aquellos prohibidos por los sabios, como en el caso de frutas que no fueron separados su diezmo. En ninguno de los dos casos y por ninguno de los dos alimentos se recita bendición (Mishná Berajot 45a, Shulján Aruj 196:1).
Asimismo quien roba alimentos, además del deber de regresarlos, no puede bendecir por ellos y en caso de hacerlo, su bendición es un agravio, tal cual está escrito (Salmos 10:3): “y el insolente ladrón se jacta de haberse burlado de Hashem”.
Quien ingiere un alimento kasher cuando tiene prohibido hacerlo, por ejemplo, si come durante un ayuno, al concluir el Shabat antes de recitar la Havdalá, antes del rezo de Shajarit o en Sucot fuera de la sucá, dado que el alimento en cuestión es kasher y solamente el momento o el lugar de la ingestión resulta inadecuado, se debe bendecir por el placer producido por este alimento.
Quien se encuentra en peligro y a los efectos de salvarse debe ingerir alimentos prohibidos, por ejemplo (animales muertos sin haber sido degollados o mal degollados), debe bendecir por estos. Si bien esta persona preferiría no ingerirlos, dado que en la práctica los come bajo permiso, ya que le salva la vida, lo cual se antepone a todos los preceptos, debe bendecir por su disfrute.No obstante, si la persona detesta un alimento prohibido, por ejemplo, si se ve en la necesidad de comer cerdo mas esto le produce asco, no debe bendecir, pues en la práctica no disfruta de la ingestión (Shulján Aruj 196:2, 204:9, Mishná Berurá 204:48).
Quien se equivocó y bendijo por un alimento que está prohibido comer, por ejemplo, carne mal degollada o jametz en Pesaj, no habrá de ingerirlos y su bendición fue recitada en vano. Incluso si el alimento está prohibido sólo rabínicamente, no lo habrá de probar en absoluto.
Lo mismo ocurre cuando durante una comida de carne una persona recita “Shehacol Nihiá Bidvaró” por un helado de leche. Dado que está prohibido rabínicamente ingerir leche en una comida de carne, no habrá de llevarse el helado a la boca. No obstante, si alcanzó a limpiar su boca con comida y bebida tras la ingestión de la carne, o si ya terminó de comer la carne y pasó una hora desde entonces, si bien la persona en cuestión sigue la costumbre aceptada en el pueblo de Israel de esperar seis horas entre las ingestas de carne y leche, que pruebe algo del helado lácteo. Esto se debe a que algunas de las autoridades halájicas (rishonim) consideran que haciéndolo de esta forma no se quebranta prohibición alguna, por lo que es mejor actuar según su opinión y no trasgredir una prohibición recitando una bendición en vano (ver en el Shulján Aruj, en Ramá y en comentaristas a Yoré Deá 89:1).
Si una persona se equivoca y bendice por un alimento el sábado por la noche previo al recitado de la Havdalá y antes de comenzar a comer recuerda que está prohibido ingerirlo, que pruebe un poco de este. Esto se debe a que el alimento en sí no está prohibido y probándolo se evita que la bendición haya sido en vano. Otro tanto ocurre cuando alguien se equivoca y bendice por algún alimento antes de recitar el Kidush (Ramá 271:5, Mishná Berurá 26).
Asimismo, si alguien se equivoca y recita una bendición por un alimento que no se ingiere por causa de una costumbre o tradición, que pruebe un poco de este para que la bendición no resulte en vano. Por lo tanto, quien por error bendice por carne en los nueve primeros días del mes de Av, que pruebe un poco de, ya que la prohibición de ingerir carne en los nueve días tiene su origen en un “minhag”. Además, probar sólo un poco no produce alegría y entonces casi no afecta al duelo.
Asimismo ocurre con quien, por error, bendice por un alimento antes del rezo de Shajarit. En ese caso que pruebe un poco de este, ya que hacerlo no implica una expresión de arrogancia puesto que lo hace únicamente para abstenerse de recitar una bendición en vano.
Quien se olvida que está ayunando y bendice “Shehakol Nihiá Bidvaró” por agua, la mayoría de los poskim opinan que no beba porque la prohibición de comer y beber en los ayunos es clara y es una norma que no se debe trasgredir. |