Pregunta: ¿Qué deben hacer los novios después de la boda cuando la novia estuvo nidá en la boda hasta que ella logre purificarse?
Respuesta: Si la novia está nidá, los novios tienen prohibido estar a solas en un cuarto antes de que hayan tenido su primera relación marital. En dado caso, el novio debe dormir con otros hombres y la novia con otras mujeres, como se explicará más adelante.
Existe un caso en el que el novio puede permanecer a solas con su novia nidá: si a la hora de la jupá ella no estaba nidá, uno de ellos decidió postergar la primera relación marital, y mientras tanto,
ella se volvió nidá. El motivo de esta permisión es que queda claro que el novio puede contenerse a sí mismo, y no existe el riesgo de que vaya a tener relaciones con ella mientras esté nidá .
Esto aplica cuando el novio no tiene relaciones porque tiene la fuerza de contenerse a sí mismo, pero si lo posponen por un factor externo, y mientras tanto ella se vuelve nidá, tienen prohibido estar a solas en un lugar privado, no vaya a ser que se despierte su deseo y terminen teniendo relaciones cuando ella está nidá. Son ejemplos de un factor externo: él sigue la tonta costumbre de esperar un tiempo antes de tener la primera relación; no sabe cómo hacerlo; no están en su casa; la novia no está emocionalmente lista; están muy cansados .
Otras autoridades discrepan de esta opinión y afirman que en cualquier situación en la que la novia esté nidá y la pareja no haya tenido relaciones maritales por primera vez, tienen prohibido estar a solas en un lugar privado, aunque él lo haya postergado voluntariamente. A pesar de que hasta ahora él tuvo la fuerza de contenerse, eso no garantiza que su deseo no lo vaya a vencer y termine teniendo relaciones con su esposa mientras está nidá . La halajá fue establecida según la primera opinión, y si alguien decide ser más estricto, recibirá bendición por ello . Ya que las diferencias que hay entre estos casos son muy sutiles, la pareja debe asesorarse con un rabino.
La prohibición de que el novio esté a solas con la novia nidá en un lugar privado aplica tanto de día como de noche. Esta prohibición de ijud es más grave que la que tiene un hombre de estar a solas con cualquier otra mujer prohibida para él, pues, en este caso, hace falta una doble guardia: “Él duerme con los hombres y ella con las mujeres”.
Existen varias opiniones con respecto a estas dos guardias:
Hay quienes opinan que no es necesario que haya varios hombres con el novio y varias mujeres con la novia, sino que basta con uno para cada uno, y los niños con entendimiento pueden servir como guardianes . Otras autoridades opinan que tanto el novio como la novia necesitan de dos guardianes . La costumbre es ser permisivos como la primera opinión, si duermen en cuartos separados y con las puertas cerradas bajo llave . No obstante, si duermen en la misma casa en cuartos separados y con las puertas cerradas, pero no bajo llave, el novio necesita dos guardianes y la novia dos guardianas. Aquellas personas que siguen la opinión del Ramá sólo requieren de un guardián para cada uno de los novios; si duermen en casas diferentes, no hacen falta guardianes del todo .
Algunas autoridades opinan que cuando la novia está nidá sólo hace falta que ellos tengan guardianes de noche, pero no los necesitan en el día; otras opiniones afirman que incluso de día es necesario.
La halajá establece que si los novios no están en un lugar privado, no requieren de guardianes; cuando están en privado, la costumbre es valerse de un niño para que lo cuide a él y de una niña que la cuide a ella. De cualquier forma, es recomendable consultar a una autoridad rabínica.