Pregunta:
Mi esposa se pone nerviosa de que quizás no está haciendo la tevilá de manera correcta. ¿Cuál es la posición correcta que debe tener al sumergirse? ¿Qué otros cuidados debe tener? ¿Tiene que abrir la boca o los ojos?
Respuesta:
La mujer no debe sumergirse en posición erguida, porque hay partes del cuerpo que se ocultan cuando la mujer está erguida. Asimismo, no debe encorvarse de manera excesiva, ya que algunas partes de su cuerpo se unen unas con las otras cuando está en esa posición. La manera ideal de hacerlo es encorvándose un poco, como una mujer que está parada al lado de una mesa y se agacha un poco para amasar o para hacer algo similar. Debe separar las piernas un poco, de modo que no estén pegadas una con otra, y tambien debe separar un poco los brazos del cuerpo. No obstante, no debe separar demasiado brazos ni piernas, para que no se le formen pliegues en la piel en otras partes del cuerpo sin que se dé cuenta; lo correcto es separarlas como lo hace cuando camina.
No es necesario que la mujer abra la boca para que le entre agua al sumergirse en la mikve, ya que la boca es considerada una de las “partes ocultas del cuerpo”, y no es necesario que llegue allí el agua; basta con que esta zona esté apta para ello. Lo mismo aplica con respecto a las axilas o a los pliegues naturales que tiene en los genitales, en los ojos, etc. Por lo tanto, tampoco es necesario que abra los ojos durante la inmersión.
Cuando una mujer cierra o abre los ojos y la boca, no debe apretarlos demasiado para que no se formen arrugas inusuales o áreas donde no pueda llegar el agua . Si una mujer apretó mucho los ojos o los abrió mucho o si apretó fuertemente la boca, hay quienes afirman que la inmersión fue inválida. Asimismo, si se sumergió sin encorvarse, como fue dicho anteriormente, hay quienes opinan que la inmersión fue inválida . Por lo tanto, en casos como estos, si todavía se encuentra en las instalaciones de la mikve, debe repetir la inmersión. Si ya regresó a su casa: si se sumergió dos veces, como fue dicho antes, no necesita volver a sumergirse . Si sólo se sumergió una vez, tiene que volver a sumergirse. Si ya tuvo relaciones maritales, debe consultarlo con una autoridad rabínica.
No es necesario que la mujer levante los pies del suelo cuando se sumerge en la mikve, y no debe hacerlo si no tiene una necesidad particular, para evitar que se le formen arrugas en la zona de las rodillas. Pero si el suelo de la mikve está lleno de lodo o de palillos o algo por el estilo, debe levantar un poco los pies del suelo para que no se le meta ninguna suciedad entre los dedos de los pies que pueda considerarse jatzitzá ; sin embargo, debe tener cuidado de no levantarlos demasiado, para que no se le formen arrugas en la zona de las rodillas ni nada similar.
Una mujer no debe sumergirse en una mikve que tenga en el piso lodo pegajoso, brea o barro que se le pueda adherir a los pies.
La mujer debe tener mucho cuidado de que ni un solo cabello quede fuera del agua cuando se sumerge en la mikve. No obstante, dado que es muy difícil cuidarse de esto, debe procurar que haya otra mujer fuera de la mikve, que revise que todos los cabellos estén debajo del agua a la hora de la inmersión. Esta mujer tiene que ser judía y su edad debe ser de más de doce años y un día. Si no hay ninguna mujer que la pueda supervisar, debe amarrarse una prenda o unos hilos en la cabeza que queden un poco sueltos, para que ayuden a que el cabello esté completamente debajo del agua y no impidan que el agua penetre en el cabello; sólo entonces puede sumergirse. |